La Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea (DGSANTE) ha hecho público el informe final de la auditoría que tuvo lugar en España, concretamente en las Comunidades Autónomas de Cataluña y Murcia, del 5 al 16 de septiembre de 2016. Esta Auditoría se efectuó con el objetivo de evaluar la vigilancia y notificación de la resistencia de las bacterias zoonóticas a los antibióticos en determinadas poblaciones de animales destinados a la producción de alimentos y en determinados alimentos.

El informe concluye que, en términos generales, las autoridades competentes han establecido un marco adecuado para la vigilancia oficial de las Resistencias a Antibióticos. De hecho, España ya efectuaba antibiogramas en alimentos y animales destinados a la producción de alimentos mucho antes de que se introdujeran los requisitos de la Decisión 2013/652/UE. Adicionalmente, en la actualidad, España dedica considerables recursos a la realización de ensayos voluntarios en otras cepas no comprendidas en el ámbito de aplicación de dicha Decisión.

No obstante, en el informe se detalla que existen algunos problemas que han debilitado la vigilancia armonizada de las Resistencias a Antibióticos, en particular, deficiencias en la representatividad de las muestras recogidas en mataderos y en establecimientos de venta al por menor. Como consecuencia de estas deficiencias, la Comisión manifiesta que la recopilación de datos de vigilancia de Resistencias a Antibióticos puede no ser plenamente comparable con los datos recabados por otros Estados miembros.

El informe formula una serie de recomendaciones dirigidas a subsanar las deficiencias detectadas y reforzar aún más las medidas de control vigentes. Entre las recomendaciones emitidas, caben destacar:

  • Garantizar que la información contenida en la descripción general del seguimiento de las resistencias remitida a la EFSA sea detallada y precisa.
  • Garantizar la representatividad de las muestras recogidas en mataderos y establecimientos de venta al por menor.
  • Garantizar que se sometan a cultivo y antibiograma todas las cepas de Salmonella disponibles.
  • Garantizar que la función coordinadora del laboratorio nacional de referencia en materia de resistencia a los antibióticos, los procedimientos de laboratorio documentados y el almacenamiento de las cepas se ajusten a lo dispuesto en la Decisión 2013/652/UE.