La EFSA ha publicado recientemente un dictamen científico en el que evalúa, por primera vez, el papel del medio ambiente en la aparición y propagación de la resistencia a los antimicrobiano (RAM) a lo largo de la cadena alimentaria.

En este dictamen se han identificado las fuentes ambientales y las rutas de transmisión de las RAM, así como las bacterias y genes resistentes de máxima prioridad para la salud pública, y se han evaluado las estrategias de mitigación del riesgo de aparición y propagación de las RAM. A la vez, se han identificado las principales necesidades de investigación en este ámbito.

Para llevar a cabo este informe, el Panel de Riesgos Biológicos de EFSA (BIOHAZ), ha analizado los entornos de producción de alimentos de origen vegetal, animal y de la acuicultura, basándose en la literatura científica existente, en evaluaciones científicas realizadas a nivel europeo, en la legislación europea y en su propio conocimiento. Para cada sector, se han definido los entornos de producción de alimentos y se han desarrollado diagramas, en los que se han plasmado los puntos críticos donde se produce potencialmente la propagación de las RAM, tal y como se muestra en la siguiente figura:

Resistencia antimicrobiana

Identificación de las fuentes ambientales y rutas de transmisión

Las principales fuentes ambientales son los deshechos fecales, tanto humanos como animales, destacando:

  • En los alimentos de origen vegetal: fertilizantes como el estiércol, ayudado por el riego y el agua superficial.
  • En alimentos de origen animal: piensos, la interacción con operarios, el agua, los pastos, el aire o el polvo, el suelo, la vida silvestre u otras especies de animales domésticos. No obstante, con los datos actuales no se puede cuantificar la importancia y contribución específica de cada una de estas fuentes, aunque todo apunta a que sean los piensos en gran medida.
  • En la acuicultura: principalmente el agua, aunque también los sedimentos y los piensos.

Identificación de bacterias y genes resistentes prioritarios en salud pública

Las bacterias resistentes fueron identificadas en:

  • El Grupo 1 de máxima prioridad, destacando:
    • Enterobacterias: Salmonella entérica y Campylobacter resistentes a carbapenemasas, cefalosporinas de amplio espectro y fluoroquinolonas.
    • Staphylococcus aureus resistente a meticilina.
    • Enterococcus resistente a vancomicina.
  • El Grupo 2 o bacterias comensales destacaron:
    • coli y Klebsiella pneumoniae resistentes a cefalosporinas de amplio espectro y fluoroquinolonas.

Entre los genes resistentes destacan los que generan resistencias a los siguientes antimicrobianos: carbapenemasas, cefalosporinas de amplio espectro, plazomicina, colistina, meticilina y oxazolidinonas.

Los factores que favorecen a su aparición son: la presión selectiva en los microbiomas, el ciclo de vida de las bacterias entre los animales y el entorno, fallos en la aplicación de las medidas de bioseguridad y en el proceso de los alimentos; fallo en los autocontroles.

Estrategias de mitigación del riesgo de aparición y propagación de las RAM

Respecto a la prevención y control de las RAM destaca en todos los sectores, el refuerzo en la implementación de buenas prácticas de higiene y medidas de bioseguridad en los entornos de producción mencionados, para reducir la transmisión de patógenos y con especial atención a las etapas en las que se produce la introducción, difusión y persistencia de la contaminación fecal.

Para lograr esto, se proponen diferentes metodologías biológicas que se centran específicamente en la reducción/eliminación de las bacterias patógenas, como son: CRISPR-Cas, los fagos o las bacterias depredadoras (que se encuentran en las primeras fases de investigación y desarrollo en este campo).

Necesidades de investigación

Los expertos también emitieron recomendaciones sobre los ámbitos prioritarios en la investigación sobre las RAM, ya que hay amplias lagunas de datos sobre el papel del medio ambiente en la diseminación de las RAM en los entornos de producción y su impacto cuantitativo en salud pública.

Por eso destacaron la necesidad de investigación en las siguientes áreas:

  • Optimizar las metodologías sensibles y estandarizadas para la detección de las bacterias patógenas y genes resistentes.
  • Definir estrategias de muestreo para los diferentes entornos de producción.
  • Validar la eficacia de los métodos de mitigación, siendo lo más urgente evaluar y desarrollar métodos validados de descontaminación dirigidos a las bacterias y genes resistentes más importantes y prioritarios en el entorno de producción, las condiciones de tratamiento térmico de los piensos y el tratamiento de los residuos fecales y las aguas residuales utilizadas para la fertilización/irrigación o el procesamiento de los cultivos.
  • Estos estudios deben estar enmarcados en el Green Deal de la UE y con un enfoque One Health.