La EFSA ha elaborado una evaluación cualitativa del riesgo para la salud pública de la contaminación bacteriana en canales de pollo, relacionada con la inspección oficial en matadero.

En cuanto a los riesgos biológicos, la evaluación realizada ha identificado las bacterias Campylobacter spp. y Salmonella spp. como los peligros más relevantes, en el contexto de la inspección de carne de aves de corral.

Debido a que estos peligros no se detectan por inspección visual, la EFSA propone establecer un sistema integrado más eficaz de seguridad alimentaria, basado en un mejor uso de la información transmitida a través de la ICA (Información de la Cadena Alimentaria) y en el establecimiento de medidas basadas en la evaluación del riesgo, que se traducen en la fijación de objetivos concretos de contaminación a nivel de canal y, en su caso, a nivel de explotación para un determinado peligro, de forma que se llegue a la categorización del riesgo de las explotaciones en función de la ICA y a una clasificación de los mataderos en función de su capacidad para reducir la contaminación de la canal.

En cuanto a los riesgos químicos, las sustancias químicas que pueden aparecer en aves de corral fueron clasificadas en cuatro categorías de preocupación potencial sobre la base de criterios predefinidos, resultando las dioxinas y los bifenilos policlorados (como cloranfenicol, nitrofuranos y nitroimidazoles) como de interés potencial. Aunque es poco probable que las sustancias químicas supongan un riesgo inmediato para la salud de los consumidores.

Por otro lado, la evaluación afirma que los programas de control de las canales deberían estar más coordinados con los controles de piensos y, además, actualizarse regularmente para incluir nuevas sustancias.

Dictamen EFSA