Evaluación Riesgo de Bisfenol A y derivados en alimentos enlatados



La Agencia Catalana de Seguridad Alimentaria (ACSA) ha publicado el estudio “Determinación de la exposición a bisfenoles y derivados epoxídicos por consumo de alimentos enlatados y envasados en plástico comercializados en Cataluña: evaluación del riesgo para la salud”, donde se han analizado muestras en busca de Bisfenol A (BPA) y Bisfenol F (BPF) y los derivados epoxídicos de ambos.
Se analizaron 420 muestras correspondientes a 36 productos alimenticios envasados en plástico o en lata comercializados en Cataluña.
Los bisfenoles y los derivados epoxídicos analizados fueron los siguientes: BPA, BPF, BADGE, BADGE·H2O BADGE·2H2O, BADGE·HCl, BADGE·2HCl, BADGE·H2O·HCl, BFDGE, BFDGE·2HCl y BFDGE·2H2O.
El BPA es el bisfenol más utilizado y estudiado. El BPF es uno de los análogos del BPA más utilizados, sin embargo, hasta ahora, ha sido muy poco evaluado
Los resultados obtenidos indican que, de los 36 productos alimenticios evaluados, en 17 (49%) no se detectó ninguno de los compuestos analizados, tanto de productos en lata como envasados en plástico.
En 19 alimentos (51%) se detectó al menos uno de los compuestos analizados (en salsas envasadas en plástico y en algunos alimentos enlatados).
El porcentaje de detección más elevado de bisfenoles y sus derivados epoxídicos lo presentó el BADGE·2H2O (40,5%), seguido del BPA (13,5 %).
La evaluación del riesgo indica que la exposición a BADGE y sus derivados (BADGE·H2O y BADGE·2H2O) no supone un riesgo para la salud de las personas consumidoras, ya que esta es casi tres órdenes de magnitud inferior a la Ingesta Diaria Tolerable -IDT- (150 µg/kg de peso corporal/día).
Por el contrario, la estimación realizada sobre los bisfenoles y derivados epoxídicos, indica que la exposición al BPA en ciertos alimentos individuales en lata está dos órdenes de magnitud por encima de la nueva IDT establecida por la EFSA (0,2 ng/kg).
Estos datos concuerdan con el informe de la EFSA sobre la reevaluación del bisfenol A (BPA) en los alimentos, de 2023.
A pesar de todo, la mayoría de alimentos analizados presentaron concentraciones de BPA por debajo del límite de detección, confirmando así que la presencia de este compuesto es puntual, y solo tiene lugar en ciertos alimentos enlatados.