La Agencia Francesa de Seguridad Alimentaria, ANSES ha realizado una evaluación de los riesgos asociados a la ingesta de nitratos y nitratos presentes en alimentos y piensos evaluando los siguientes aspectos y emitiendo una serie de recomendaciones para reducir su exposición:



En esta evaluación se analizaron tres binomios alimentos-patógenos más relevantes:

  • Jamón cocido/Listeria
  • Salchichón curado/Salmonella
  • Jamón curado/C. botulinum

Aunque una reducción del nivel de aditivos podría aumentar significativamente el riesgo microbiológico asociado al consumo de estos productos, ANSES considera que se puede llevar a cabo dicha reducción de nitratos y nitritos siempre y cuando se apliquen medidas compensatorias validadas para controlar estos riesgos microbiológicos.


En el caso de los nitratos, el 65 % de la exposición alimentaria está asociada al consumo de productos vegetales, en particular verduras de hoja, el 25 % al agua potable y menos del 4 % a alimentos que los contienen como aditivos.

En cuanto a los nitritos, más de la mitad de la exposición de adultos y niños proviene del consumo de productos cárnicos procesados, debido a los aditivos de nitritos utilizados para su elaboración.

Teniendo en cuenta todas las fuentes de exposición, la Agencia señala que casi el 99 % de la población no supera la IDA, pero la aplicación del enfoque MOE (Margen de exposición), el 3% de la población infantil podría superarlo. Por tanto, concluye que limitar la adición intencionada de estos compuestos a los alimentos constituye un objetivo de seguridad alimentaria para reducir la exposición general de la población.


Desde los trabajos realizados por la EFSA (2017) y la IARC (2018), determinados estudios científicos evidencian que existe una asociación entre el riesgo de cáncer colorrectal y la exposición a nitratos y nitritos, ya sea por ingesta a través del agua potable o de carnes procesadas. No obstante, ANSES recomienda seguir investigando para poder confirmar dicha asociación.


ANSES propone una serie de medidas colectivas e individuales para la reducción de la exposición de la población a los nitritos y nitratos:

Colectivas

  • Controlar la calidad del agua destinada al consumo humano.
  • Optimizar determinadas prácticas, como las prácticas agrícolas relacionadas con la aplicación de fertilizantes y estiércol animal que contribuyen a reducir las concentraciones de nitratos en el agua bruta y el agua potable, así como los niveles de nitratos en los productos vegetales.
  • Reducir el uso de nitritos en los productos cárnicos procesados, al tiempo que se aplican medidas compensatorias estrictas para hacer frente al riesgo microbiológico.

Individuales

  • Limitar el consumo de carne procesada, limitándolo a 150 g/semana.
  • Diversificar el consumo de frutas y verduras.