Evaluación del riesgo de contaminantes químicos para la población infantil británica
El Comité de Toxicidad de los Productos Químicos en los Alimentos, Productos de consumo y medio ambiente (COT) del Reino Unido ha publicado su informe anual 2018, en el cual evalúa los riesgos y realiza una estimación de la ingesta semanal tolerable de los siguientes contaminantes químicos para la salud de la población infantil:
Metilmercurio
Las exposiciones al metílmercurio, para bebés de 0 a 6 meses de edad que se alimentan exclusivamente con leche materna, así como para bebés y niños pequeños (0-18 meses) no alimentados exclusivamente con leche materna o exclusivamente alimentados con fórmulas en polvo, están por debajo de la Ingesta Semanal Tolerable (IST) establecida por la EFSA (1,3 μg/kg p.c.).
En la población infantil con dieta mixta, suponiendo que todo el mercurio presente en el pescado es metilmercurio, la IST se supera ligeramente en los grupos de edad de 12 a <15, 15 a <18 y 18 a <24 meses. Sin embargo, el contenido de metilmercurio en el pescado varía mucho según las especies, tamaño, edad y dieta, y es muy poco probable que los niños de esta edad consuman exclusivamente peces depredadores grandes con alto contenido de metilmercurio. En base a dichas estimaciones, el gobierno ha recomendado que las mujeres embarazadas, las mujeres que intentan estarlo y los niños de corta edad eviten consumir tiburón, pez espada o marlin.
Cadmio
La exposición estimada al cadmio procedente de la leche materna está por debajo de la IST establecida por la EFSA (2,5 μg/kg p.c) pero, en algunos casos, en los alimentos infantiles la exposición estimada superó la IST hasta en aproximadamente 2,5 veces. Sin embargo, el COT señaló que no es preocupante, ya considera que la ISTP estimada por EFSA es muy conservadora para el corto período durante el cual los bebés o los niños pequeños consumen alimentos infantiles.
El COT concluyó que los niveles de cadmio en el medio ambiente y los alimentos no son causa de preocupación por la salud de los bebés y niños pequeños. Sin embargo, considerando la toxicidad acumulativa de dicho metal pesado en el organismo, deben continuar los esfuerzos para minimizar los niveles en el medio ambiente.
Cobre y Níquel
La ingesta estimada, tanto de cobre como de níquel, a través de los alimentos infantiles está por debajo de las ingestas recomendadas.
Ocratoxina A (OTA)
La exposición a la OTA no es motivo de preocupación toxicológica para bebés de 0-6 meses de edad alimentados con leche materna y con fórmulas en polvo, así como para los niños hasta los 5 años que consumen diversidad de alimentos.
Por otro lado, el COT apunta que no se puede descartar un rango de exposición a los bebés alimentados exclusivamente con leche materna entrañando un pequeño riesgo. No obstante, considerando la corta duración de la lactancia materna y el hecho de que una exposición continua a una concentración tan alta de OTA es poco probable, no se esperan efectos adversos para la salud.
Micotoxinas T-2, TH-2 y Neosolaniol
Las exposiciones medias estimadas de ingesta de estas 3 micotoxinas a través de cereales están por debajo de las ingestas diarias tolerables (IDT) recomendadas por EFSA, por lo que no son motivo de preocupación toxicológica.
