Numerosas Agencias Europeas de Seguridad Alimentaria y organismos de Salud Pública han evaluado la exposición a largo plazo de la población infantil de 11 países europeos a 40 colorantes alimenticios. Para realizar dicha evaluación de la exposición se han combinado datos de consumo realizados a niños de 1 a 10 años (incluyendo de 11 a 14 años en Chipre) durante 2 días usando el método recordatorio 24 horas con datos de concentración de colorantes en alimentos obtenidos y utilizados por EFSA en sus evaluaciones.

Para cada colorante, se han calculado dos escenarios: los niveles máximos permitidos de acuerdo a la legislación comunitaria vigente (llamado escenario “MPL”), y los patrones de uso declarados como máximos reales (llamado escenario “nivel máximo de uso”).

Los resultados muestran que la exposición a los colorantes alimentarios difiere entre los países sujetos a estudio, y dependiendo del escenario utilizado. Todas las estimaciones de la exposición deben ser consideradas lo más conservadoras posibles, partiendo de la asunción que el nivel máximo permitido o declarado de los colorantes se encontraba en todos los alimentos consumidos por los niños.

Las agencias han recomendado afinar la Evaluación del Riesgo de la exposición de la población europea infantil a colorantes alimenticios en dos aspectos: por una parte, aumentar el conocimiento en los diferentes grupos de alimentos para poder mejorar la cohesión entre éstos y los colorantes, y en la naturaleza de la concentración del colorante para valorar su representatividad, y, por otra parte, transferir los datos de consumo de la población infantil a la base de datos de la EFSA para que puedan ser utilizados en otras evaluaciones de exposición.

Evaluación de la exposición de niños a colorantes alimenticios